Changó y el fuego cósmico

Capaz de acciones violentas con una marcada inclinación sexual y un erotismo particular que la distingue entre todos los Orichas. Changó y el fuego cósmico es otro libro de Héctor Izaguirre que también pertenece a la colección Secretos de la Santería. Con Changó -sincretizado con la Virgen Santa Bárbara, patrona de los bomberos y de los astilleros- descubrimos en el Panteón Yoruba a una divinidad muy significativa y especial por ser portadora de características conductuales parecidas a las del hombre. Es uno de los Orichas más queridos y respetados. Su importancia es tal que no se le puede relegar en el Panteón Yoruba.

En su libro, Héctor Izaguirre se dedica a profundizar en la fuerza de Changó y su identificación con la sexualidad, la virilidad y la justicia. A su vez, profundiza en los caminos de Changó, nos comenta sobre las características de sus hijos, relata interesantes Historias y anécdotas sobre el Oricha, conoceremos también sobre Changó y los sueños, además. de los símbolos oníricos y sus significados.

Changó simboliza el rayo, el trueno de la electricidad, es la fuerza que emiten los cuerpos. Su energía se vincula a todos los procesos magnéticos. Su presencia se hace sentir y si intensifica su manifestación, al hombre común no le resulta fácil soportarla. Cuando se producen las grandes tormentas eléctricas se puede apreciar con exactitud la representación de este Oricha, dinámico, activo y violento. Es una divinidad muy humana y por ello participa de las diferentes inclinaciones del hombre. Podíamos afirmar –expresa Izaguirre- que Changó es una divinidad descendida a lo humano, con el único objetivo de poder ayudar al hombre. Ha perdido su reino, para poder adaptarse a esa realidad. Es como un estar al mismo nivel, un tú a tú. En eso radica su gran popularidad entre los pueblos y comunidades, quienes resumen en Changó una parte esencial de su creencia ancestral.

Que cada uno alerte a su hijo

Para que Changó no sea acusado de

secuestro cuando él opta

por ser feroz convierte a un árbol en

hombre cuando opta por

ser feroz convierte a un hombre

en un animal

Esta oración de Changó recoge la opinión del pueblo sobre el Oricha, refiere a la seguridad de su poder, de allí que a muchos le ocasione terror.

Características de los hijos de Changó

Son dos las tipologías de los hijos de Changó. En sentido genérico, todos ellos son voluntariosos, inclinados al logro de sus objetivos con una gran capacidad de lucha, constantes en vencer los obstáculos. Su inteligencia aflora en todos sus actos, con una conciencia plena de su propio valor. Son autocríticos y afrontan sus fracasos con claridad y altivez. Por otra parte, descubrimos a personalidades pendencieras, fiesteras, libertinas, con una rápida inclinación hacia la violencia, con accesos desproporcionados de cólera. Así mismo, vemos una marcada tendencia machista, incluso en las mujeres, donde lo importante será la propia satisfacción. Pueden llegar a una vida sexual poco controlada, con las consecuencias negativas a que esto pueda conducir.

Ante todo esto, el Oricha Changó recomienda ser justo, ecuánime, continuo y evaluador de los resultados de las acciones. Jamás deberán ser indiferentes y no bajarán la guardia ante el enemigo o las dificultades. Deben siempre avanzar. Para ellos, el peor pecado es el de la omisión. No deben ser tímidos pero sí prudentes. El guerrero sabe cuándo y dónde actuar. El rayo sabe dónde va a caer.

Changó y los sueños

Cuando la noche llega y el sol desaparece una conciencia interior abre sus puertas al alma y ella refleja los mensajes al creyente con símbolos propios de cada Santo.

Oración para recibir mensajes durante los sueños:

Si no es mucho, Señor,

lo que te pido

y mi carne mortal

se lo merece,

permitid que esta noche

cuando cese

el tráfago hablador,

el bullicio pleno,

venga mi alma

que estará dormida,

la luz muy querida

de la revelación.

Lo que vuestra bondad

me ofrece,

en las noches divinas,

cuando mece

a la brisa, el viento,

a la fe, el sentimiento.

Sería cual mezquina,

pena mía,

si no puedo,

al despertar,

por más que esfuerce,

despierto recordar,

en el rigor del día.

¿Por qué eh de olvidar

en la vigilia

lo que en las noches eternas

vos me dais contra perfidia?

Mi alma en esas noches,

de mística armonía,

cual avecilla perdida

en afiebradas alas;

vuelo en pos

del eco de tu voz

que es profecía.

Dejadme que recline

por fin, en la blancura de la

almohada,

esta cabeza, doliente

e interesada en saber de

ante mano

lo que Arcano,

en su justo celo,

niega al ser humano.

Para así tener un guía

en cada sueño

y una tierna esperanza

en cada noche,

aunque a veces en realidad

solloce.

Al tener que oír

de la onírica balanza

el justo reproche

por las tantísimas flaquezas

mías.

Cantos

El canto tiene un inmenso poder unificador y gregoriano. Su canto estimula al grupo e impulsa a la danza. Es una verdadera comunión con el Santo.

Yo uso mi cabeza para tener

mucho

yo uso mi cabeza para ser cubierto

de bondad

yo pongo mi cabeza al suelo

para que el lanza piedras

Ogboni, el del título

Nosotros venimos al dueño

del hechizo

para pedir larga vida y

para que se nos cuide

Venga el rayo, venga el espíritu

Está vivo, está vivo

Changó, con tu brillantez,

eres rey, ven

Que para siempre esté vivo

Changó el resplandor de tu realeza

tú puedes hacer

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